¿Una vez que uno ha probado las aguas de la vida eterna que fluyen en nuestro interior, la vida del cuerpo comienza a perder todo significado.
Es verdad que el mar de la vida está lleno de terrores y traiciones, rocas contra las que tenemos que forcejear, remolinos y tiburones, pero al viajar a través de sus aguas nosotros no estamos solos. Tenemos como nuestro piloto al Maestro espiritual. Todo lo que necesitamos es tener fe en nuestro guía.
Me mantuve buscando el secreto de ese reino,
pero nadie pudo revelarlo;
Cuando encontré a Sant Rajinder, mi Maestro,
él le dio a mi alma la clave para esa Morada Eterna.
Hemos sido bendecidos con un cuerpo humano, el más elevado de toda la creación. Esta es
Ahora estamos atados a este mundo material, transitorio. Nuestro cuerpo, como todas las cosasen la tierra, es efímero.